A quiénes beneficia la medida y cuáles son los objetivos del Programa de Desarrollo Frutícola.
El Gobierno destinará $1.500 millones para mejorar la situación productiva y comercial de los sectores frutícolas de las provincias de Río Negro y del Neuquén. Con ese fin, la Secretaría de Agricultura creó el Programa de Desarrollo Frutícola de las provincias de Río Negro y del Neuquén, que alcanzará a los actores directos de la cadena de producción: peras, manzanas, vid y frutos secos.
La medida beneficia a productoras, empacadores, frigoríficos, comercializadores e industrializadores, según la Resolución 226/2023, publicada este martes en el Boletín Oficial.
Según lo dispuesto, el Programa tiene por objetivos:
- Mejorar las condiciones productivas de las cadenas de valor de productos regionales, impulsando la mejora de la calidad y diferenciación a través de las herramientas disponibles de la Secretaría de Agricultura.
- Fomentar el procesamiento y el agregado de valor en origen y la innovación organizacional en el desarrollo o mejora de nuevos productos y procesos productivos.
- Aumentar las exportaciones y asistir financieramente a los actores de las cadenas de valor frutícolas afectados por situaciones adversas productivas y/o comerciales para incorporar bienes de capital y capital de trabajo.
Con ese fin, el Estado Nacional otorgará, en concepto de Aporte No Reintegrable (ANR) a favor del Ministerio de Producción y Agroindustria de Río Negro, un total de $1.275 millones, que se destinarán de manera exclusiva a la constitución de un fondo rotatorio, con la finalidad de financiar un 10% del total mediante los ANR y el 90% restante a través del otorgamiento de créditos a las personas beneficiarias para mejorar sus procesos productivos.
Por su parte, el Ministerio de Industria y Producción del Neuquén recibirá, por el mismo concepto, $225 millones. Ambos Ministerios habían manifestado a la Secretaría de Agricultura la necesidad y conveniencia de crear un Programa Regional con el objetivo de mejorar las condiciones productivas y comerciales de la actividad frutícola, indicó el Poder Ejecutivo.
A la vez, destacó que la producción de pera y manzana encuentra en el mercado nacional e internacional «una excelente oportunidad de desarrollo, que la Argentina debe acompañar y potenciar». Esa producción, en la campaña 2021/2022, se vio afectada por distintos incidentes climáticos que produjeron mermas superiores al 10% en el volumen obtenido en la campaña anterior: en el caso de la manzana, es el valor más bajo de los últimos diez años.
Según cifras oficiales, la producción nacional actual se encuentra en torno a 1.100.000 millón de toneladas de fruta fresca, distribuidas casi equitativamente entre pera y manzana, con un leve predominio de la primera. La tendencia productiva que se registra en los últimos años es a la baja, quedando bastante lejana la producción de 2011, cuando se superó 1.900.000 millón de toneladas.
Río Negro representa más del 77% de la superficie implantada con peras y manzanas, mientras que Neuquén el 13% y Mendoza el 8%.
Nota original de Noticias Argentinas.