Capital Privado (“Private Equity”):
El Capital Privado exhibe una evolución positiva pero modesta en EEUU en el transcurso del año, en un entorno desafiante de recaudación de capital para la fusión y adquisición de compañías con niveles elevados de tasa de interés.
En el período enero – septiembre, la captación de capital tuvo un desempeño módico. En concreto, la industria captó USD 236.300 millones mediante 220 nuevos fondos de inversión.
En tanto, la actividad de fusiones y adquisiciones de las compañías totalizó USD 577,9 miles de millones a través de 5.163 transacciones en 9 meses del año.
Hacia adelante, la perspectiva es de tasa de interés más baja pero elevada a niveles históricos. Así, no se esperan cambios de tendencia en el desempeño histórico de esta clase de activos.
A largo plazo, es esperable que las Inversiones Alternativas en Capital Privado representen una porción más elevada en las carteras de los inversores.
Bienes Raíces (“Real Estate”):
En el segmento de Bienes Raíces prevalece la cautela, puesto que los altos costos de financiamiento actuales dificultan la compra de viviendas. Se prevé que el sector cobre impulso en tanto la Fed continúe relajando progresivamente la política monetaria, lo que tendería a impulsar la demanda de nuevas propiedades y la actividad de la construcción.
El índice Case Shiller muestra que los precios de las viviendas unifamiliares cedieron -0,1% mensual en septiembre.
Se prevé que las tasas hipotecarias –hoy en 6,8%, el nivel más elevado de los últimos 4 meses– se mantengan elevadas debido a la resiliencia económica.
Dado que es esperable que la tasa de referencia se mantenga en niveles elevados históricamente, esto pondría un tope a la valoración de estos activos. Por ende, el real estate Multifamiliar se posiciona como negocio de renta.
Así, lucen interesantes otros segmentos de Bienes Raíces: Industrial, Logístico, Centros de Datos, Estudiantil y Residencial Multifamiliar, con mejores niveles de renta y potencial valorización que propiedades residenciales tradicionales.
Deuda Privada (Crédito Privado):
La Deuda Privada mantiene su atractivo por sobre el Capital Privado, con rendimientos anuales superiores al 10%. La expectativa es que el segmento mantenga un buen desempeño este año, pese a que el ciclo de recortes iniciado en la tasa de interés de la Fed obliga a las compañías a ajustar las líneas de crédito y las condiciones de los préstamos para continuar siendo competitivas.
Los rendimientos nominales mayores por sobre el de Capital Privado y Real Estate se debe a que la Deuda Privada está atada a tasas de interés flotantes, es decir, los intereses que paga están vinculados a la tasa de referencia de la autoridad monetaria.
De este modo, luce conveniente optar por aquellas con enfoque más conservador sobre la elección de los deudores, dado los altos costos de financiamiento que predominan en la actualidad.