En el almuerzo que mantuvieron ayer en la Casa Rosada, se hizo hincapié en las exigencias del FMI, orientadas a bajar el déficit y conseguir reforzar las reservas internacionales.
Tras una reunión que mantuvieron el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Sergio Massa, el Gobierno decidió suspender la Ley de Alquileres vigente. “La ley de alquileres no va más”, afirmaron desde la cartera de Economía.
Desde su entrada en vigencia, el 1º de julio de 2020, la norma recibió duras críticas del sector inmobiliario y los propietarios, quienes sostienen que generó incertidumbre e inseguridad jurídica en el mercado, lo que se trasladó al precio de la renta.
Entre los cuestionamientos más fuertes, se encuentran la ampliación del plazo de los contratos que se extendieron de dos a tres años, y en la actualización anual en base a un índice que establece en Banco Central, que cruza salarios e inflación.
Los números tras la aprobación de la ley
El costo del alquiler en la Argentina subió un 245% desde la sanción de la nueva ley de alquileres 27.551. En números, un contrato que ese mes se cerraba por un valor de $20.000 hoy se transformó en uno de $69.000.
Desde entonces, el índice de alquileres computa un total de 32 meses consecutivos de crecimiento desde julio de 2020 hasta marzo de 2023. Los datos surgen de un análisis del Centro de Estudios de la Nueva Economía de la Universidad de Belgrano sobre los datos del Banco Central de la República Argentina.
En este contexto, los especialistas en el sector proyectan que este semestre será el peor en la historia para el mercado locativo. El desalentador pronóstico tiene un motivo claro: el 30 de junio se cumplen tres años de la entrada en vigencia de la ley 27.551 que en plena pandemia dejó en terapia intensiva al mercado, ya que, como se dijo, contribuyó al desabastecimiento en la oferta -a partir de una gran cantidad de propietarios que decidieron volcar los inmuebles a la venta- y un fuerte aumento de los precios de los contratos.
Sin ir más lejos, en marzo los contratos que se renovaron en base al ICL comenzaron con subas de un 89,9%. Por otra parte, para los primeros días de este mes, se estima que quienes deban actualizar el monto del alquiler verán reflejado en su cuenta un aumento del 92,59%, según las estimaciones del Instituto de la Vivienda de la Ciudad.
Quienes deban hacer la actualización anual a mediados de mes enfrentarán subas un poco más altas, del 93,75%.
Mientras tanto, hace tiempo que los nuevos contratos de alquiler (es decir los casos de los departamentos y casas que están disponibles en el mercado) superaron esa barrera. En febrero, quienes buscaron departamento para alquilar en la ciudad se encontraron con que las unidades publicadas habían aumentado un 111,9% en el último año.
Con información de Yahoo.