Una plataforma de negocios del campo argentino lanzó un programa gratuito y abierto para que cualquier actor del sector agropecuario pueda medir la huella de carbono de su campaña 2023-24 de soja y girasol.
Durante los últimos años la sustentabilidad se convirtió en un activo indispensable para la economía del mundo, impulsando a la agroindustria nacional a adaptarse a las nuevas demandas del mercado.
Tras la incorporación de Viterra a Agrology en 2023, y en alianza con la plataforma Puma, las tres empresas impulsaron conjuntamente un programa de medición de huella de carbono que ya supera las 500.000 hectáreas.
Esta herramienta permite a los productores lograr mejores condiciones de exportación en mercados internacionales que demandan trazabilidad y sustentabilidad.
«El próximo paso lógico fue abrir el acceso del programa a cualquier persona que quiera implementarlo en sus campañas de soja y girasol. Simplemente deben crear un usuario en nuestra web y seguir los pasos que se indican para compartir los datos productivos necesarios para la realización del cálculo . Uno de nuestros principales objetivos para el 2024 es superar el millón de hectáreas con medición de huella de carbono», explicó Rafael Cavanagh, CEO de Agrology.
La medición y reducción de la huella de carbono van en un camino acelerado a convertirse en un requisito y un elemento indispensable en todas las industrias.
Por un lado, la Unión Europea aprobó una normativa (número 995/2010) que regula los productos libres de deforestación.
Esta regulación entrará en vigencia a partir de 2025 y los países que no cumplan con el parámetro no podrán exportar sus cultivos.
Pero también los consumidores son protagonistas: según datos del Bureau of Economic Analysis, el 45 por ciento de la población latinoamericana (principalmente Millennials e integrantes de la Generación Z) está dispuesta a pagar más por productos sustentables y responsables con el medio ambiente.
«En tiempo récord, junto a Viterra y Puma, implementamos un programa sustentable que es de vanguardia en todo el mundo. Creemos que Argentina puede ser líder a la hora de ofrecer alimentos con impacto verde», precisó Rafael.
Y detalló: «Para los usuarios medir la huella de carbono de su producción no tiene que implicar más trabajo, se trata simplemente de aprovechar los datos que ya están disponibles y convertirlos en información certificable».
«Esto se trata de agregarle competitividad a los productos nacionales de forma sencilla por medio de las buenas prácticas agrícolas que el productor nacional ya realiza», concluyó.